14 de junio: El Sindicato ALMA se une a la campaña global #ScreenwritersEverywhere
El miércoles 14 de junio, el Sindicato de guionistas de España convoca a sus miembros a participar en una acción internacional dedicada a apoyar la huelga del Writers Guild of America (el sindicato de guionistas de Estados Unidos).
ALMA, el sindicato de guionistas de España, será parte de la red global de sindicatos de guionistas de cine y televisión y organizaciones profesionales de otras especialidades audiovisuales que unen sus fuerzas para apoyar la huelga emprendida por los 11.500 guionistas del WGA el dos de mayo por el fracaso de las negociaciones con la Alliance of Motion Picture and Television Producers (AMPTP).
Campaña de solidaridad global con el WGA, el sindicato americano de guionistas
La movilización contará con guionistas de 33 países (Argentina, Alemania, Australia, Austria, Bélgica, Brasil, Bulgaria, Canadá, Chile, Colombia, Corea, Dinamarca, Eslovenia, España, Finlandia, Francia, India, Irlanda, Israel, Italia, Letonia, Luxemburgo, México, Noruega, Nueva Zelanda, Países Bajos, Polonia, Portugal, Reino Unido, Sudáfrica, Suecia, Ucrania, además de Estados Unidos con el apoyo de la alianza mundial de guionistas, IAWG, y la federación europea, FSE.
Los actos de solidaridad incluirán piquetes en puntos estratégicos de ciudades de todo el mundo, manifestaciones ante las sedes de miembros de la AMPTP, actividad constante en redes sociales y en todos los husos horarios del planeta, compartiendo la información necesaria para trasladar no solo a colegas guionistas, sino también al público audiovisual la importancia de reconocer las legítimas protección de este colectivo profesional.
Las reivindicaciones de los guionistas en Estados Unidos
La negociación del convenio colectivo que debe regir las relaciones entre guionistas y estudios, plataformas y productoras en Estados Unidos tiene tres ámbitos definidos.
Acordar unas condiciones retributivas justas. En un periodo durante el cual las plataformas audiovisuales han presumido de lograr ingresos y beneficios récord, los salarios, la retribución de los guiones (script-fees) y los residuals por la exhibición de las obras audiovisuales en nuevas ventanas han caído vertiginosamente. El perjuicio para los guionistas, además del económico, está en la indefinición de los trabajos para los que se les contrata, así como de su insignificante participación económica en el éxito de sus obras.
Lograr una organización y condiciones de trabajo adecuadas. Los autores estadounidenses piden acabar con las mini-rooms, que imponen equipos cada vez más pequeños en series que todavía no han sido aprobadas. Esto causa que sus guionistas asuman funciones de escritura desligadas funcional y económicamente de la producción, impide el acceso de nuevo talento a las salas de guión y culmina con un número inferior de guionistas escribiendo más proyectos.
Establecer normas básicas sobre el papel de la Inteligencia artificial. El WGA exige que solo las personas humanas sean guionistas, y que el material humano creado por ellas no pueda utilizarse para desarrollar programas de inteligencia artificial, lesionando la originalidad y la propiedad intelectual que ha servido para “entrenar” los algoritmos.
Guionistas de cine y televisión estadounidenses llevan ya dos meses en huelga, renunciando a cobrar dinero de los proyectos que estaban desarrollando o que iban a iniciar, porque empresas como Disney + (>$7.000 millones de ingresos en 2022[1]), Netflix (>$31.600 millones de ingresos en 2022[2]) o Amazon (>$35.200 millones de ingresos en servicios de suscripción en 2022[3]) se niegan a convenir para los próximos tres años contraprestaciones justas, a compartir el éxito económico de sus películas, series, documentales o programas o a aceptar cualquier control sobre la inteligencia artificial que pueda perjudicar sus intereses en el desarrollo de contenidos audiovisuales en el futuro.
La política empresarial de maximización del beneficio a costa del modelo de negocio y del talento está arruinando la posibilidad de desarrollar carreras ricas en la creación de historias audiovisuales. Si el único criterio de éxito es el mercado bursátil, las perjudicadas en primer lugar son las condiciones de sus trabajadores creativos, pero acto seguido lo será el público. Por último, la calidad del arte y la cultura audiovisual no podrán mantener su riqueza ni sostener la industria que se ha construido sobre ellas.
El movimiento internacional de las organizaciones profesionales de guionistas quiere llamar la atención sobre el momento trascendental que atraviesa esta industria: un modelo audiovisual centrado exclusivamente en resultados bursátiles nunca vistos es un modelo que ha perdido su razón de ser. Sin embargo, ignorar que el origen de las historias es la semilla de la que se han extraído los beneficios empresariales de los últimos quince años bien puede convertirse en la fuente de hundimientos financieros nunca vistos.
[1] https://www.businessofapps.com/data/disney-plus-statistics/
[2] https://www.businessofapps.com/data/netflix-statistics/
[3] https://www.businessofapps.com/data/amazon-statistics/, aunque no se determinan ingresos audiovisuales.
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